La
diferencia en el salario medio anual entre hombres y mujeres en Andalucía es
menor que en España. Según datos de
la Agencia Estatal de Administración Tributaria, esta diferencia en 2012 fue de
4.279 euros mientras que en España fue de 5.004 euros, es decir, 725 euros superior.
Esta diferencia salarial entre hombres y mujeres ha disminuido en Andalucía en
550 euros desde 2009 mientras que en España la reducción ha sido menor, de 319
euros.
No obstante la reducción de la diferencia salarial
entre hombres y mujeres tanto en Andalucía como en España no se debe al
crecimiento de los salarios medios que perciben las mujeres sino a que los
salarios medios que perciben los hombres han caído más entre 2009 y 2012 de lo
que lo han hecho los de las mujeres.
La brecha
salarial es superior entre las personas que trabajan a tiempo parcial. Según datos de 2011 de Eurostat la brecha salarial
entre los hombres y mujeres que trabajan a tiempo parcial alcanza el 34,6%,
mientras que entre quienes trabajan a jornada completa desciende hasta el 10,2%.
La última EPA publicada muestra que el 70% de las personas que trabajan a
tiempo parcial en Andalucía son mujeres. En Andalucía, el 28% de las mujeres
ocupadas trabajan a tiempo parcial, mientras que solo un 9,4% de los hombres
ocupados tienen esta modalidad de contrato. El 56% de las mujeres declara
trabajar a tiempo parcial porque no encuentra un trabajo a tiempo completo y un
15% por estar cuidando a otras personas.
La mayor
formación de las mujeres no les garantiza salarios más altos. En Andalucía, en 2012, las mujeres fueron el 55%
de las personas matriculadas en enseñanzas universitarias, el 60% de las
personas que terminaron sus estudios universitarios y el 58% del alumnado de
estudios de máster. No obstante la EPA muestra que los hombres acceden a los
rangos salariales más altos con menor formación que las mujeres, así por
ejemplo entre los hombres que se sitúan en el decil 9 (2.528,1 € a
<3.255,6 € mensuales) el 57,6% tiene titulación superior, mientras que
para las mujeres este nivel formativo parece una condición sine qua non puesto
que de las mujeres en ese decil el 87,9% de las mismas cuenta con titulación
superior.
La brecha
de género salarial es mayor en el sector privado. Según datos de Eurostat para 2011 la brecha
salarial en España se situó en el 20,3% en el sector privado y en el 12,3% en
el sector público. Los condicionantes de la brecha salarial como la dificultad
en el acceso a puestos directivos, las interrupciones de la carrera laboral,
los desequilibrios en las labores de cuidado, la temporalidad, el tipo de
jornada laboral, el grado de feminización del sector de actividad, la falta de
neutralidad en los procesos de selección o de transparencia en el sistema de
remuneración afectan en menor medida al sector público, pero la Administración
no está al margen de esta distorsión.
La brecha
de género salarial se agrava con la edad.
Los datos de Eurostat de 2011 muestran que en España, la brecha salarial entre
hombres y mujeres se incrementa con la edad. Así entre los hombres y mujeres de
menos de 25 años la brecha es del 4,8%, aumenta al 8,7% entre los 25 y 34 años,
alcanza el 18,8% entre los 45 y 54 años y entre los 55 y 64 años ya es del
23,7%.
La brecha
salarial se traslada a las pensiones.
Un informe de la Comisión Europea[1]
cifra la brecha en las pensiones en la UE27 en el 39% y en España en el 34% lo
que puede explicar que la tasa de riesgo por pobreza de las mujeres supere a la
de los hombres. En 2012 en Andalucía el 66% de las pensiones de jubilación
fueron percibidas por los hombres y el 34% por las mujeres, como consecuencia
de la escasa participación de las mujeres en el mercado de trabajo en el
pasado. El importe medio de las pensiones de jubilación percibidas por las
mujeres fue un 39% inferior a las percibidas por los hombres.
[1] The Gender Gap in Pensions in the
EU (2013) http://ec.europa.eu/justice/gender-equality/files/documents/130530_pensions_en.pdf