Seis de cada diez licenciados universitarios en carreras empresariales en Alemania son mujeres. Sólo cuatro son hombres, pero tienen todas las papeletas para ascender en las empresas y llegar a puestos de responsabilidad. Deutsche Telekom ha decidido romper esta tendencia. Y no porque le parezca un reparto injusto, que también, sino porque sus responsables están convencidos de que redundará en mejores resultados para la empresa.
Esta resolución ha convertido a la operadora alemana en la primera compañía cotizada de su país en imponer un sistema de cuotas. En 2015, el 30% de los cargos directivos altos y medios en todo el mundo tendrán que estar en manos de mujeres. Y para eso se pondrán en marcha mecanismos específicos de selección para captar a las mejores desde que salen de la Universidad.
"Tener más mujeres en el equipo directivo no responde a un refuerzo del igualitarismo mal entendido", explicó ayer el primer ejecutivo de Deutsche Telekom, René Obermann. "Es un asunto de justicia social y una necesidad categórica para nuestro triunfo. Tener a más mujeres en los puestos claves nos va a permitir, simplemente, operar mejor", añadió.
Seguir leyendo en Cinco Días.
No hay comentarios:
Publicar un comentario